Las Mascotas

Amados hermanos y amigos, este lunes cumple exactamente cuatro semanas de muerta una bella perrita mascota de nuestra casa y en el transcurso de esta semana pasada, murió en el zoológico de mi país una elefanta que por sesenta años fue la alegría de generaciones, impresionante el ver como la bondad de un animal nos conmueve, yo llore mi perrita, pero admirable es ver todo un pueblo al cuidado de su mascota, la elefanta del zoológico... mi perrita se llamaba “niña”, la elefanta “manyula”.

Los animales de la creación de Dios habitan los cielos, la tierra y el mar. Comparten las fortunas de la existencia humana y tienen parte en la vida humana. Dios, quien reparte los dones a todas las criaturas vivientes, se ha servido, en varias ocasiones, de animales o les ha convertido en recuerdos de los dones de salvación.

- Los animales fueron salvados del diluvio y luego fueron hechos parte del pacto con Noé. (Génesis 9.9..10)
- El cordero pascual nos recuerda el sacrificio y la liberación de la esclavitud en Egipto. (Éxodo 12.3..14)
- Un gran pez salvó a Jonás; (Jonás 2.1..10)
- cuervos le llevaron pan a Elías; (1 Reyes 17.6)
- los animales también participaron del arrepentimiento de Nínive; (Jonás 3.7)
- y los animales comparten la redención que Cristo hace de toda la creación de Dios.

Por tanto, gloria y honra a Dios por los animales, domésticos y salvajes. Al hacerlo, alabamos al Creador y damos gracias a Dios por ponernos como mayordomos sobre todas las criaturas de la tierra.

Las Familias Y Las Mascotas

Muchos niños pequeños piden una mascota en algún momento. Se ha comprobado que tener una mascota es beneficioso tanto para los niños como para los adultos. Las mascotas hacen bien a la salud física y mental, les enseñan a los niños acerca de la responsabilidad, la amistad, el amor y la confianza. Sin embargo, no todas las circunstancias familiares son las indicadas para tener una mascota. Aunque usted quiera concederle a su hijo una mascota, al final, la responsabilidad de cuidarla recae sobre usted como padre, por eso debe decidir lo correcto para su familia.

La decisión de tener o no tener una mascota
La salud de su familia. Uno de los impedimentos más comunes para tener una mascota es que uno de los miembros de la familia sufra de asma o alergia. Si está pensando en tener una mascota y no sabe si su hijo es alérgico, es conveniente que consulte al pediatra para que le hagan una prueba antes de comprometerse a tenerla. Además de ser alérgicos a una mascota en particular, los niños también pueden ser alérgicos al pelaje o a la caspa de los animales. Si su hijo es alérgico, es posible que aún así pueda tener una mascota, pero deberá elegirla cuidadosamente. Algunas mascotas son "hipoalergénicas" y podrían ser ideales para su familia. Comuníquese con un veterinario para que le sugiera las opciones que más le convengan.

Tenga en cuenta los costos.
Antes de tomar la decisión de llevar una mascota a su casa, averigüe cuánto le costará comprarla y cuidarla. Para cuidar algunas mascotas se necesita más dinero que para cuidar otras, por ejemplo, los perros y los gatos necesitan, como mínimo, alimento y cuidados médicos, cuyos costos pueden acumularse y resultar muy altos. Si le parece que puede pagar los gastos del cuidado de una mascota pero no el precio de la misma, piense en adoptar una en un refugio de animales o aproveche la oportunidad si un amigo o conocido está regalando cachorros en lugar de comprarla en una veterinaria o tienda de mascotas.

Asuma el compromiso.
Ciertas mascotas necesitan más espacio y atención personal que otras. Si no tiene suficiente espacio interior (e incluso exterior) para alojar a un perro o no puede estar en su casa durante el día para atenderlo, es aconsejable que piense en tener una mascota que necesite menos atención y espacio.

La elección de la mascota.
Toda la familia debe participar en la elección de la mascota. Existen innumerables opciones de mascotas, ¡desde el pez de color más pequeño hasta el Gran danés más inmenso! Si un perro o gato es demasiado grande o le da mucho trabajo y a su hijo no le gusta la idea de tener un pececito, hay muchos animales intermedios que puede elegir, como una tortuga un conejito, etc. Solo usted sabe cuánta responsabilidad puede asumir su hijo para atender a una mascota, por eso, elija una mascota basándose en el nivel de responsabilidad de su hijo.

El cuidado de una mascota.
Antes de llevar una mascota a su casa, hable con su familia sobre sus expectativas y responsabilidades. Lean algunos libros sobre la mascota que eligieron y sobre cómo hay que cuidarla. Decidan qué funciones cumplirá cada uno, incluso los niños pequeños. Recuerde que, a fin de cuentas, usted es el responsable de la mascota y posiblemente quien termine cuidando de ella, por eso, ¡asegúrese de que USTED quiere tenerla!

Cuando muere una mascota.
La muerte de una mascota puede ser muy traumática para un niño. Nuevamente, su hijo puede demostrar emociones muy distintas, como indiferencia o mucho enojo. Hablar sobre la muerte le ayudará a su hijo a expresar su dolor. Evite decir cosas como: "Dios se llevó a la mascota" o "la mascota está dormida" porque puede tener miedo de irse a dormir o puede pensar que Dios se llevará a alguien más. A algunos niños les ayudan los rituales, como el entierro de la mascota, mientras que otros no quieren verla más.

De todas formas no hay cosa mas bella entre nuestros compromisos con Dios de cuidar la creación, que tener una o varias mascotas (según sus posibilidades) en casa. ¿Y usted ya tiene su mascota?

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