Cría Cuervos Y Te Sacaran Los Ojos

O la Ingratitud de las Personas a las que Hemos Ayudado

Cría Cuervos y te sacaran los Ojos es un refrán español que se refiere a la ingratitud de las personas. También es un consejo para practicar el bien enfocándose en la naturaleza de las personas para no sufrir con sus ingratitudes.

Se dice de la ingratitud de las personas a las que amablemente hemos ayudado, y que terminan por usar los hechos con los que los hemos beneficiado como armas para pagar el bien con mal.

La costumbre de esta ave carnívora de comer los cadáveres empezando por los ojos sirve para simbolizar la ingratitud, al desagradecido que paga con el mal el bien que le han hecho. Por el elevado número de ingratos, este refrán recomienda ser prudentes al hacer favores.

La gratitud es un valor y una virtud que se demuestra con amor, respeto y cariño hacia aquellos que lo favorecieron y ayudaron.

“Cría cuervos y te sacarán los ojos”

También es un consejo para practicar el bien enfocándose también en la naturaleza de las personas para no sufrir con sus ingratitudes. Se conoce como gratitud a un sentimiento de reconocimiento o agradecimiento que una persona tiene hacia quien le ha hecho un favor.

La palabra gratitud es de origen latín “gratitudo” que significa “gratitud” y el sufijo “-tudo” que expresa “de cualidad”.

La gratitud viene acompañada de otros sentimientos como el amor, fidelidad, amistad y la persona muestra afecto a través de acciones o palabra concretas.

La gratitud es sumamente importante entre las relaciones humanas, en la que ambas partes se turnan en dar y recibir con el objetivo de alcanzar una sociedad cooperativa y solidaria entre los individuos que la forman. Una persona puede sentir agradecimiento por la ayuda económica, por el trabajo ofrecido, la prestación de un objeto que necesita, la asistencia en una enfermedad o momento de convalecencia, entre otros. En este sentido, también se puede sentir gratitud por quien ofrece su amistad o amor.

Como tal, la gratitud ocurre cuando alguien realiza algo por el bienestar de otro individuo, sin esperar nada a cambio y con esta acción siente la misma felicidad que la persona que fue beneficiada de esa acción.

El término gratitud está ligado con la religión, especialmente la cristiana. El creyente debe de agradecer a Dios todas las circunstancias que vive diariamente lo cuales serán recompensados con grandes placeres.

Los sinónimos de gratitud son: Agradecimiento, reconocimiento, correspondencia, ofrenda, satisfacción, entre otros. Por otro lado, lo contrario de gratitud es ingratitud, desagradecimiento, etcétera.

Los fieles realizan peticiones de ayuda o protección a Dios y cuando algo que fue pedido se materializa, ocurre un sentimiento de gratitud, procurando una manera de agradecer por haber alcanzado una gracia. La gratitud de los creyentes se expresa a través del cumplimiento de promesas, servicio y oración.

En referencia a este punto, algunos sostienen que un individuo puede ser leal a un conjunto de cosas, en cambio, otros sostienen que únicamente se es leal a otra persona ya que este término atañe exclusivamente a relaciones interpersonales.

No obstante, en una amistad no es suficiente únicamente el valor de lealtad sino también debe de estar presente la sinceridad, el respeto, la honradez, el amor, entre otros valores.

La lealtad es un valor que consiste en el respeto, obediencia, cuidado y defensa de lo que se cree y en quienes se cree, puede ser a una causa, proyecto o persona.

Por su parte, la fidelidad es el poder o virtud de dar cumplimiento a las promesas, a pesar del cambio de ideas, convicciones o contextos. Como tal, la fidelidad es la capacidad de no engañar y no traicionar a las demás personas de su entorno.

La lealtad está asociada a la fidelidad “alguien leal es alguien que no te da la espalda, ni con actitudes, ni en pensamientos”. Dios quiere que haya hombres y mujeres leales a Dios, a la familia, a la iglesia y a su trabajo.

Salmos 12:1...2 NVI "Sálvanos, Señor, que ya no hay gente fiel; ya no queda gente sincera en este mundo. No hacen sino mentirse unos a otros; sus labios lisonjeros hablan con doblez" 

Nunca la iglesia va a cumplir su misión sobre la tierra sino se practica la lealtad. Por ello Pablo pide que Dios elija a los fieles. 1 Corintios 4:2 "ahora bien, a los que reciben un encargo se les exige que demuestren ser dignos de confianza" NVI 

En el celo de Dios, este plantea un principio de lealtad que los hombres y mujeres, influenciados por el enemigo, han querido reducir exclusivamente al dinero, cuando en verdad, es un principio básico de toda relación humana y Mateo 6:24 lo resume así: “Nadie puede servir a dos señores, pues menospreciará a uno y amará al otro, o querrá mucho a uno y despreciará al otro…” NVI.

Judas tenía un corazón desleal y malo, estaba esperando criticar a Jesús, los desleales tienen algo característico: juzgan a sus líderes y están prontos a mirar siempre los defectos de los demás.

En este sentido, hay que prestar atención a lo que decía Jesús en Mateo 12:30 “El que no es conmigo, contra mi es; y el que conmigo no recoge, desparrama” 

Una interpretación de este pasaje es que el liderazgo exige que el creyente esté con lealtad y en un solo corazón con su autoridad, de lo contrario termina haciendo la contra y desparramando lo que la autoridad trabajó para juntar.

Los que trabajan para el Reino de Dios y son léales en todo tiempo, tendrán recompensas terrenales y eternas. En Mateo 25:12 Jesús estaba contando sobre la parábola de los talentos “Y su señor le dijo: Bien hecho, siervo bueno y fiel (leal), sobre poco has sido fiel (leal), sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor”.

Estas palabras tal vez nunca las escuchemos de un hombre, pero sí del Señor, cuando lleguemos al cielo. Dios recompensa a las personas leales.

Que nuestro Padre celestial nos ayude a ser buenas personas, leales en todos los ámbitos de nuestra vida y nos aparte de toda similitud con el cuervo que inspiro el refrán: “Cría cuervos y te sacarán los ojos”

Dios te bendiga y tengas una semana de victoria.