Tres Ponderaciones Para Una Apertura Por Saúl Guevara


Hemos en los últimos cinco meses tratado de poner en manos de líderes y ovejas, recursos para sopesar las prácticas de su iglesia en la pandemia del Covid-19. La idea es ayudar a los pastores, líderes de la iglesia y miembros a tomar medidas para el futuro inmediato de su iglesia. Sabemos que, la metodología de comunicación del evangelio será diferente en cada caso; que los contextos culturales y regionales juegan un papel en la conformación de los canales a través de los cuales se fluye más fácilmente. Con cambios en nuestras realidades ocurriendo cada hora, los pastores y líderes de la iglesia deberán ser flexibles en la forma en que ministran en las próximas semanas.

Nuestro intento es alentar a los líderes a evaluar a diario sus circunstancias a través de un marco saludable a medida que reciben nueva información pandémica.

¿Un marco teológico para ajustar las funciones de la iglesia?

En estos cinco meses, muchas iglesias han tomado decisiones propias con respecto a la manera de funcionar. Las respuestas van desde no hacer absolutamente nada, hasta alterar por completo todos los aspectos del servicio de adoración trasladando todo a las redes sociales. Entre estos extremos, hay innumerables variedades de hacer las cosas. Estas no son decisiones fáciles, e instamos a los pastores y líderes a abordarlos con humildad, demostrando gracia y tolerancia para otros que manejan estas decisiones de manera diferente.

Pero ¿debe ser la respuesta para cada iglesia hacer lo que es correcto a sus propios ojos? ¿Deberíamos aceptar todas las respuestas como igualmente válidas? Por supuesto que no.

Debemos darnos cuenta de que la iglesia debe responder con fidelidad, debe surgir de un entendimiento bíblico de la iglesia y su misión. La Biblia es clara y extensa en las definiciones de la iglesia y su misión, pero queremos señalar tres temas significativos en este momento:

1.    La importancia de la adoración y la reunión de los santos

La iglesia local es una congregación de creyentes que deposita gran importancia en la reunión de los santos juntos para adorar a Dios (Hebreos 10:25), la edificación de los santos (Efesios 4:11…16) y la proclamación del Evangelio (Hechos 1:8). La congregación que describe la biblia, necesita congregarse cara a cara o morirá. No podemos abandonar la reunión de la iglesia local.

Algunos han usado y mal interpretado Hebreos 10:25 como justificación para prácticas imprudentes en medio de una pandemia. La importancia de congregarse para la iglesia no puede ser exagerada, pero en nuestra cultura occidental, hemos arraigado que esas reuniones deben ser todos los domingos por las mañanas con un programa rígido (oración, alabanza, predica) y almuerzo al mediodía.

Vea la forma en que las iglesias del resto del mundo se congregan. Leemos de misioneros en África, que las iglesias a menudo eran de diez personas sentadas debajo de un árbol. Sin púlpito. Sin grupos de alabanza. Las iglesias perseguidas en otras partes del mundo se han reunido por años en hogares y sitios secretos. ¿Renuncian a congregarse porque nunca han tenido una campaña financiera para edificar un lugar elegante a la orilla de la carretera para reunirse?, No

También existe un error en el lado opuesto que se ha de evitar, debido que la iglesia bíblica debe congregarse. En la búsqueda de un equilibrio, los que estamos tomamos decisiones sobre qué debe hacer la iglesia en estas próximas semanas debemos propiciar oportunidades, para la reunión de los santos. Gran parte de la vitalidad de la iglesia proviene de la capacidad de sus miembros de participar en lo que las Escrituras describen como los "mandamientos mutuos" (Juan 13:34, Romanos 12:10, 12:16, 14:19, 1 Tesalonicenses 5:11). Descuidar la Reunión de los santos elimina las oportunidades para que nuestras congregaciones se amen y se apoyen mutuamente, lo cual es crucial en estos momentos.

En momentos como estos, es posible que, por algún tiempo, esperamos breve, tengamos que reunirnos por vía telefónicas o video y usar este tiempo para reflexionar en la importancia de congregarnos.

Independientemente de los que se requiera de nosotros, debemos hacer todo lo posible para fomentar una atmósfera que de importancia a congregarnos juntos dentro de nuestros lugares de adoración. Puede ser una reunión más pequeña de lo que normalmente estamos acostumbrados o puede ser, a través de medios de redes sociales, o puede ser servicio de adoración diferente a las reuniones semanales. Sin embargo, la iglesia debe unirse lo mejor que pueda.

2.    La importancia de amar a las ovejas

Segundo, los pastores son llamados a proteger a sus ovejas (1 Pedro 5: 2). Muy a menudo, suponemos que esta protección tiene que ver con herejía o pecado o alguna forma de enseñanza antibíblica. Aunque esto es cierto, no creemos que la responsabilidad pastoral termina en la doctrina. Cuidar de las ovejas significa cuidar su corazón, mente, cuerpo y alma.

En tiempos como estos, llenos de incertidumbre, Cuidar a las ovejas significa llamarlos a confiar en la seguridad que solo se encuentra en el evangelio. Significa guiar a nuestras congregaciones hacia la confianza del Dios soberano, todopoderoso que tiene el mundo entero en sus manos, y recordarles la promesa que su iglesia estará con él por la eternidad.

Sin embargo, también significa protegerlos de los falsos evangelios que afirman que las personas deben tener suficiente fe (quizás ir a reuniones grandes en medio de una pandemia) para que Dios los bendiga y aseguran que Dios los protegerá contra de la enfermedad. Nuevamente, ese es un evangelio de prosperidad, no el evangelio bíblico. Recuérdale a ese falso evangelio la historia de la iglesia, de los miles de creyentes que murieron junto sirviendo a los que tenían enfermedad en tiempos de peste.

Aún más, en ocasiones extraordinarias como las que ahora presenciamos, la protección de las ovejas se extiende al bienestar físico real. Todos tenemos en nuestras iglesias evangélicas personas de edad mayor. Debemos considerar a aquellos en nuestras congregaciones, nuestros hermanos y hermanas, que corren el mayor riesgo de complicaciones graves de este virus. Una llamada telefónica o un saludo por wasap, puede hacer la diferencia

3.    La importancia de amar al prójimo

Tercero, a los cristianos se nos ordena amar a nuestro prójimo (Mateo 22:36…40). En tiempos sin precedentes como el que vivimos, quizá esto sea un concepto complicado. Hace solo unas semanas, pensamos que sabíamos lo que significaba amar a nuestros prójimos. Hoy, este mismo mandamiento parece requerir mucho más. Albert Mohler (*) lo dijo de esta manera: “Para los cristianos, el mandato de amar a nuestro prójimo ahora se ve muy diferente dadas las realidades del coronavirus ... Pero la iglesia de Jesucristo ha estado aquí antes. Los cristianos a lo largo de la historia de la iglesia han enfrentado el desafío de la peste. Nuestras circunstancias y situaciones son diferentes, pero la teología y nuestro compromiso como cristianos siguen siendo los mismos.”

Muchos han recurrido a Twitter y Facebook para explicar que, en momentos como estos, amar verdaderamente al prójimo podría significar mantenerse apartado de ellos. Así como consideramos a los que están en riesgo dentro de nuestras propias congregaciones, también debemos considerar el riesgo generado por la rápida propagación de esta enfermedad para aquellos que están fuera de nuestras congregaciones, aquellos que pueden no tener un conocimiento real del verdadero evangelio.

En una pandemia, crear distancia social salva vidas. Amar al prójimo, al menos a corto plazo, puede significar cooperar con el gobierno y otros para crear el aislamiento físico necesario para frenar este virus.

Sin embargo, debemos ser cuidadosos y no pasar por alto los otros aspectos del amor al prójimo que son tan esenciales para el testimonio de la iglesia como cumplir con la necesidad de distanciamiento. Después de todo, nuestros prójimos no son simplemente seres físicos, animales sin alma.

Queramos o no, el sentimiento de aislamiento vendrá. El miedo y la desesperación están a la vuelta de la esquina incluso ahora mismo. Una crisis como ésta descubre el vacío del materialismo, descubre la gran cantidad de falsos evangelios y descubre la gran cantidad de creyentes que al igual que los nueve leprosos no agradecieron.

Ahora más que nunca, por nuestro amor al prójimo, heredado de Jesús, debemos encontrar maneras de amar a nuestros vecinos creando espacio y hablando con claridad sobre la única esperanza verdadera y dónde se encuentra.

(*) Albert Mohler, nacido el 19 de octubre de 1959 (edad 61 años), Lakeland, Florida, Estados Unidos, es un teólogo histórico estadounidense, el noveno presidente del Seminario Teológico Bautista del Sur en Louisville, Kentucky, y anfitrión del podcast "The Briefing", donde analiza diariamente las noticias y los eventos desde una "cosmovisión cristiana".
S.A.G. 17 AGO 2020 






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