No Pierdas Este Día

¿Te has puesto a pensar que este día no volverá?, será único e irrepetible.

Lo que hoy hagas será un paso más en la construcción de tu vida.

Si pierdes este día en cosas vanas y sin sentido retrasaras cosas buenas y bellas, entorpecerás el camino que Dios tiene para ti.

Quizá sea hoy un día determinante donde estamos escribiendo la historia, que es también nuestra historia.

No hagas hoy cosas de las que mañana te avergonzaras.

Hay dos días en cada semana en los que no nos debemos preocupar. Dos días que se deben guardar libres de miedo y ansiedad.

Uno De Esos Días Es Ayer. Ayer con sus equivocaciones y pesares, faltas y confusiones, sus dolores y tristezas. Ayer ha pasado para siempre, fuera de nuestro control. Todo el dinero del mundo no podría cambiar ni una cosa que hayamos hecho, ni podemos borrar una palabra. Ayer ya paso.

El Otro Día Sobre El Que No Debemos De Preocuparnos Es Mañana: Mañana, con sus posibles adversarios, sus problemas, sus promesas grandes y sus pequeños logros. Mañana volverá a salir el sol, ya sea en esplendor o detrás de una mascara de nubes, pero subirá. No tenemos parte en el mañana, pues aun no ha nacido.

Y Solo Queda Un Día: Hoy

Cualquier hombre puede pelear la batalla de un solo día. Cuando nos cargamos con esos horripilantes pensamientos para el ayer y el mañana, entonces nos derrumbamos. No es la experiencia de hoy lo que lastima a los hombres, sino la amarga culpa, algo que sucedió ayer y el miedo de lo que traerá el mañana. Vivamos pues, tan solo un día a la vez, y dejemos confiadamente a Dios todo lo demás.

Basta recordar: "Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal". (Mateo 6:34).

Nuestras acciones determinan nuestro destino, somos como constructores de nuestro porvenir. Siembra hoy semillas buenas, así cosecharás buenos frutos, rechaza hoy el odio, la amargura y el resentimiento. Recuerda siempre que al final de todo solo hay dos alternativas para una vida eterna... o eternamente con Dios o eternamente con Satanás.

Hoy es día de perdonar, de pasar por alto las ofensas. Si alguien te hirió, comprende que todos somos capaces de herir y que nadie es perfecto.

¿Sabes que hacen los halcones cuando los cuervos quieren atacarlo? Comienzan a volar en círculos remontado a una altura cada vez mayor y llegan a tanta altura... tan alto, pero tan alto, que los cuervos ya no pueden llegar, porque su naturaleza no les permite llegar allí. Así debe ser nuestro corazón, como los halcones, cuando el ataque de las falsas acusaciones, el odio, el rencor y las malas intenciones te quieran atacar, toma fuerzas y levanta tu espíritu tan cerca de Dios que no puedas hacer otra cosa que amar y perdonar, no dejes tu corazón en la bajeza, en la oscuridad de un mundo sanguinario; no hagas de la venganza tu defensa.

Recuerda que la falta de perdón esta ligada con la arrogancia, cuando nos equivocamos la mejor actitud es la humildad de corazón y debemos decir: "Si, me equivoque, perdona" esta actitud te libera, te mantiene en paz. No hay paz para la soberbia. Seamos sabios y entendamos que cualquiera se puede equivocar.

Si quieres aprovechar bien este día, comienza por estar libre interiormente, porque con heridas no podremos edificar cosas buenas, las ataduras del pasado nos estancan.

Si sientes que tu vida esta llena de estas ligaduras, tal vez sea bueno comenzar a desatarlas de a una, es un proceso, tal vez no se desaten todas de una vez, pero comienza hoy, no sigas sufriendo, no sigas tratando de ocultar, no sigas precipitado y aturdido por una vida de afanes, llena de apuros.

¿Qué estas sembrando?, ¿ansiedad?, ¿afán por ser más rico?, ¿egoísmo?, ¿venganza?, ¿rivalidad?, recuerda que todo lo que el hombre siembra eso también cosechara.

Te rogaría hicieras una pausa y trates de usar toda tu imaginación en lo siguiente: Supón que estas en el último día de tu vida, ponte en ese momento. ¿Qué crees que pasará? Cierra tus ojos... ¿qué ves?, medítalo... piénsalo... en ese día ya no se podrán enmendar muchas cosas, a lo mejor ni una, tal vez sea tarde, muy tarde. Ahora piensa y respóndete ¿Cuándo será ese día?... No lo sabes, pero si sabes que llegara.

Pero te tengo una noticia buenísima... Todavía estas a tiempo de llegar a ese día y de sentirte henchido... rebosante.

No siembres hoy lo que mañana no quieras cosechar, puede ser tarde y ese día será inevitable.

El pasado ya paso, no podemos hacer mucho y el futuro es incierto, solo tenemos control sobre acciones presentes, ocupémonos de hoy. No vivas en el pasado, pero tampoco en el futuro, mientras planeas tu futuro no olvides que hay un presente. Cada día trae su propio afán. El Hoy se realiza cada día y es el día de actuar, de corregir, de reencausarnos y arrepentirnos.

Si aun hay cosas que sientes, no puedes superar, si los problemas te han derribado, entonces es hora de levantar tus ojos al cielo, es hora de mirar hacia el gran hacedor de la historia, el rey de los siglos, invisible a los ojos naturales, pero visible a nuestro espíritu inmortal. Al único y sabio Dios, creador de todas las cosas. Aquel que conoce tu mente y tu corazón y habita en luz inaccesible, a aquel que es Señor del cielo y de la tierra y que tiene su trono en dos lugares principales: uno es en las alturas de su reino eterno y otro lugar es en los corazones humildes y sencillos, en los pobres de espíritu, en los que quebrantaron su orgullo y saben que en él hay una respuesta; una bella respuesta que te la voy a decir, el nombre de esa respuesta es una persona y esa respuesta se llama Jesús, si, Jesús el Hijo de Dios. Nunca lo olvides, si algo tienes que recordar, es esto: Jesús te ama. Nunca lo olvides: Jesús te ama. No endurezcas el corazón.

Aquel que ha logrado marcar al mundo de tal manera que nos referimos a la historia antes y después de Él, (AC y DC) también puede dar un vuelco a tu corazón y marcarte para darte su vida, su amor, su camino y su salvación. Ven a Jesús, si quieres una vida mejor, no lo dudes... ven a Jesús amigo... Ven a Jesús. Esto no es hueca filosofía, ni absurdo fetichismo, ni religiosidad hipócrita, es la verdad que puede cambiar tu vida.

Cada día tiene su propio afán y si nos trae cosas buenas elevemos una oración al Cielo de agradecimiento; si nos trae cosas "malas" (que nada es malo, todo depende de cómo se mire), también, elevemos la misma oración de agradecimiento, esta vez por la cruz del día, que bien vivida, nos abrirá las puertas del cielo.

Así, pues que al planificar nuestras vidas, día a día, tengamos la libertad de espíritu de poner TODO en manos de Dios y dejar que las cosas pasen según Su Voluntad.

Jesús dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida y nadie puede llegar al Padre si no es por mí." Juan 14:6

Recomendación práctica para el día de Hoy:

¿Alguna vez se ha sentido muy preocupado al punto de no poder dormir bien o desconcentrarse en el trabajo o estudios?

Descanse en el Señor. Empiece a hablar en fe declarando con su boca y creyendo en su corazón que Dios resolverá todas sus necesidades económicas, de salud, trabajo o lo que sea.

Practique la generosidad en medio de la escasez.
Amen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario