"Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto a su tiempo y su hoja no cae; y todo lo que hace prosperará." Salmo 1:3
Creo firmemente que cada uno de nosotros tenemos una comisión, un propósito en la tierra y Dios hará lo que tenga que hacer para cumplir su propósito en ti. Como tú eres árbol del plantío de Jehová, El tiene todo el derecho de plantarte en el lugar donde solo El sabe que darás fruto. La bendición que tenemos los árboles de Dios es que estamos destinados a crecer y a llevar frutos.
En Jeremías 17:8 leemos "Será como árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces junto a la corriente; no temerá cuando venga el calor, y sus hojas estarán verdes; en año de sequía no se angustiará ni cesará de dar fruto." Y el Salmo 92:13 declara que los que están plantados en la casa de Dios florecerán en sus atrios. El deseo de Dios es que puedas florecer y prosperar. Pero tu necesitas tomar decisiones para que puedas heredar las promesas. Por Ejemplo:
¿Estas Plantado?.,.. “Será como árbol plantado junto al agua” (Jeremías 17:8). No dice los que van a la casa del Señor, sino que los que están plantados en la casa del Señor. Si no estas plantado no podrás crecer. Y si no estas plantado en el lugar correcto no producirás buen fruto.
¿Que tan fácil extiendes tus raíces?... “que extiende sus raíces junto a la corriente” (Jeremías17:8). Cuando un árbol esta firmemente arraigado no es muy difícil desarraigarlo y aquellos involucrados con la obra, participando en actividades distintas y comprometidos con el bienestar y crecimiento de la Iglesia será difícil moverlos. A diferencia de aquellos que viven un cristianismo frívolo y nunca se dejan involucrar completamente.
¿Puedes soportar el calor?... “No temerá cuando venga el calor” (Jeremías 17:8). La vida no nos promete una vida sin pruebas ni retos, pero si nos promete que saldremos victoriosos. Si tu estas plantado en la casa del Señor tendrás tiempos de prueba pero no temerás al resultado de esta.
¿Es tu salud espiritual una prioridad?... “y sus hojas estarán verdes” (Jeremías 17:8). Siempre debes recibir el sustento de la palabra y ser renovado por el Espíritu Santo. La realidad de la vida es que mientras mas creces mas cuesta mantenerte en forma. Igual es en la vida espiritual.
¿Te gobiernan las estaciones?... “en año de sequía no se angustiará” (Jeremías 17:8). Los que están realmente plantados no temen las temporadas de sequía. Son aquellos que ponen a Dios primero cuando tienen problemas en sus finanzas o cuando atraviesan dificultades en su matrimonio. Entienden que las estaciones son periodos específicos de tiempo y se paran firmes.
¿Bendecir a otros es tu estilo de vida?... “ni cesará de dar fruto” (Jeremías 17:8). No tiene sentido que un fruto se quede en el árbol porque se pudre. Tristemente estos son los que son fructíferos en sus vidas, pero nunca rinden sus frutos para bendecir a otros. La verdad de las cosas es que al final somos bendecidos para ser una bendición
Tomemos en cuenta a Mateo 15:13 “Pero respondiendo él, dijo: Toda planta que no plantó mi Padre celestial, será desarraigada.”
Las palabras de Jesús son palabras fuertes, estaba diciendo una tremenda verdad y los fariseos se escandalizaban de lo que El predicaba, les dijo; toda planta que mi padre no planto será desarraigado, (cortado de raíz) la planta que Dios planta no será desarraigada podrán venir tormentas, se puede doblar pero no será cortada. Los fariseos tenían letra, conocían la palabra pero eran ciegos, por eso Jesús les dice a sus discípulos un ciego no puede guiar a otro ciego, les dice la planta que yo no sembré aunque se vea bonita, será cortada de raíz.
Estoy seguro que siempre habrá corrientes de agua. "En las alturas abriré ríos y fuentes en medio de los valles, abriré en el desierto estanques de agua, y manantiales de aguas en la tierra seca". Isaías 41:18 Esta es la herencia de los árboles de Jehová que aun en el desierto estamos destinados a crecer. ¿Dónde nos llevará?, no sabemos. ¿Cómo lo hará? Tampoco lo sabemos. Pero Dios tiene un plan bueno y perfecto.
Regresemos a Salmo 1:1..3.Es como el árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan.¡Todo cuanto hace prospera!
Este Salmo habla de una gran verdad dentro del jardín botánico de Dios y es que aquel hombre o mujer que busca, medita, obedece la Palabra de Dios es en esta vida un Árbol Plantado, para dar y llevar frutos para la honra y gloria de Dios, quien es el que con su Palabra alimenta las raíces de este árbol y le da sabiduría, amor, ternura, y muchos frutos de justicia.
Es un árbol plantado que da constantemente frutos buenos, no malos ni podridos, estamos hablando del fruto del Espíritu. Gálatas 5:22- 25" Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros". Dios quiere tratar personalmente con nosotros para que seamos árboles que demos sombra, fruto, descanso, paz y delicia a aquellos que nos rodean y para que nosotros como cristianos nunca demos lugar al desánimo o desaliento sino que estemos firmes y dando frutos.
Nosotros somos comparados con árboles, por lo cual es muy importante que evidenciemos lo siguiente:
Los árboles tienen raíces que representan la fe: entre más grande sea nuestra fe, más grande son las raíces y entre más grande sean las raíces seremos más fuertes y aunque un viento fuerte venga, no serás arrancado. La Biblia dice que si tenemos fe como un grano de mostaza podemos decir a una montaña échate al mar y pasara. El tronco es nuestra vida espiritual y la comunión con Dios, ya que es la base, la estructura y lo que une las raíces con las hojas. Las hojas son nuestras virtudes, dones y el servicio que son los que embellecen la vida cristiana así como las hojas con el árbol. El agua ayuda a hidratar el árbol. Juan 4:14” mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna”
El Espíritu Santo representa el agua que hidrata nuestra vida, y sacia nuestra sed.- Apocalipsis 22:17.” Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”.
Los árboles en las estaciones durante el año tienen días buenos y días difíciles:
Primavera: Es cuando hay días de abundancia cuando estamos en la presencia de Dios y el Espíritu Santo fluye por nuestra vida. Esta es la etapa más bonita y más hermosa de la vida cristiana y depende de ti que tanto dure. (Génesis 27:28).
Verano: Esta etapa es la del deber dónde cada árbol tiene que dar frutos según su naturaleza. Recordemos que el fruto del Espíritu Santo es el que debemos dar.
Otoño: Es la tentación y si caemos en esa etapa lo dones (las hojas) que embellecían se empiezan a secar y caer. Pero si soportamos y seguimos llenos del Espíritu Santo no nos pasa nada como algunos árboles que siguen verdes y pomposos en otoño.
Invierno: Es la etapa más cruda y dura de la vida cristiana es la etapa de la prueba dónde se sufre y la mayoría de los árboles han perdido sus hojas pero hay algunos árboles que siguen grandes fuertes y verdes porque tienen el sustento así debe ser con nosotros que a pesar de la dificultad sigamos firmes y adelante.
Y recuerda siempre que estas plantado por Jehová y El esta contigo..., entonces ¿Quién contra ti?
MUY BUENA RELEXION , DE GRAN BENDICION PARA NUESTRAS VIDAS EN ELL CAMINAR DEL CREYENTE.. BENDICIONES!!
ResponderEliminarexcelente muchas gracias a veces escuchamos y leemos pero no interpretamos correctamente la representacion a través de la cual Dios nos da su mensaje.
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