¿Te Quedarías Sin Un Ojo? Parte 1


En muchas ocasiones acorralados por nuestros problemas, nuestras maledicencias o por cualquier otra razón, llegamos a perder la visión de quien es nuestro Dios y de una u otra forma, el enemigo que es muy propositivo, nos tiende la trampa y muchos caen en ella.

En esta oportunidad, vamos a hablar sobre ello, con el propósito de que reflexionemos y hagamos todo lo que de Dios hemos aprendido para evitar caer en esas estratagemas del enemigo. -

Para lo anterior nos valdremos del texto bíblico de 1 Samuel 11:1…11 NVI:
“Najás el amonita subió contra Jabés de Galaad y la sitió. Los habitantes de la ciudad le dijeron: Haz un pacto con nosotros, y seremos tus siervos.
Haré un pacto con ustedes —contestó Najás el amonita—, pero con una condición: que le saque a cada uno de ustedes el ojo derecho. Así dejaré en desgracia a todo Israel.
Danos siete días para que podamos enviar mensajeros por todo el territorio de Israel —respondieron los ancianos de Jabés—. Si no hay quien nos libre de ustedes, nos rendiremos.
Cuando los mensajeros llegaron a Guibeá, que era la ciudad de Saúl, y le comunicaron el mensaje al pueblo, todos se echaron a llorar. En esos momentos Saúl regresaba del campo arreando sus bueyes, y preguntó: «¿Qué le pasa a la gente? ¿Por qué están llorando?» Entonces le contaron lo que habían dicho los habitantes de Jabés. Cuando Saúl escuchó la noticia, el Espíritu de Dios vino sobre él con poder. Enfurecido, agarró dos bueyes y los descuartizó, y con los mensajeros envió los pedazos por todo el territorio de Israel, con esta advertencia: «Así se hará con los bueyes de todo el que no salga para unirse a Saúl y Samuel».
El temor del Señor se apoderó del pueblo, y todos ellos, como un solo hombre, salieron a la guerra. Saúl los reunió en Bézec para pasar revista, y había trescientos mil soldados de Israel y treinta mil de Judá. Luego les dijo[a] a los mensajeros que habían venido: «Vayan y díganles a los habitantes de Jabés de Galaad: “Mañana, cuando más calor haga, serán librados”».
Los mensajeros fueron y les comunicaron el mensaje a los de Jabés. Estos se llenaron de alegría y les dijeron a los amonitas: «Mañana nos rendiremos, y podrán hacer con nosotros lo que bien les parezca».
Al día siguiente, antes del amanecer, Saúl organizó a los soldados en tres columnas. Invadieron el campamento de los amonitas, e hicieron una masacre entre ellos hasta la hora más calurosa del día. Los que sobrevivieron fueron dispersados, así que no quedaron dos hombres juntos.

Decíamos que en la desesperación de los problemas tomamos actitudes equivocadas, veamos algunas de las que tuvieron los habitantes de Jabes.

1)    Intentaron hacer alianza con el enemigo

Cuenta el relato que subió Nahas amonita, y acampó contra Jabes de Galaad. Y todos los de Jabes dijeron a Nahas: Has alianza con nosotros, y te serviremos. Todos los habitantes de Jabes con tal de no tener problemas, determinaron hacer alianza con los amonitas (enemigos del pueblo de Dios, ellos y los moabitas son descendientes de la relación incestuosa de Lot con sus hijas)

El pueblo de Dios, a igual que muchos en la actualidad, pensaron que podrían convivir con sus enemigos. Vemos aquí que esta es una actitud que no es propia solo de esos tiempos... Hoy en día muchos creyentes piensan y actúan como la gente de Jabes. Para no tener problemas, ni críticas de la familia, o en el trabajo, hacen alianza, y aceptan vivir con un pie en el mundo y otro pie en la iglesia

Pero la Palabra nos advierte que con el enemigo no se juega...

Hace algún tiempo leí y vi el reportaje en televisión de una noticia terrible: "Un perro despedazó a un niño mientras jugaba con él" ¿Cómo pudo suceder eso, me pregunté? Lo habían criado de cachorro... lo trataban como de la familia... pero sus instintos nunca cambiaron...

Amados no podemos convivir con las normas de Cristo y las del mundo. Recordemos que ciertamente hay que darle al Cesar lo que es del Cesar, pero con la aclaración “que en todo aquello que no contravenga (contrario) a la Palabra de Dios”.

Estamos llamados a no unirnos en yugo desigual... los cristianos no podemos actuar como el mundo... no importa lo que diga la abuela o la tía... nosotros somos real sacerdocio, nación santa pueblo adquirido por Dios.

La tendencia a conjuntar y armonizar corrientes de pensamientos o ideas opuestas del mundo con la iglesia, solo puede dar como resultado una anarquía religiosa.

Recuerda que por siglos se cometieron los crímenes más aberrantes en el nombre de Dios. En 1 Juan.2:15, Juan nos advierte: “No améis al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él”.

No estamos autorizados a participar con las doctrinas del enemigo.

Se ha vuelto común por el escuchar las voces del mundo y no la de Dios, que los cristianos hagan alianza con el enemigo. El cristianismo es un estilo, una forma, de vida diaria, que nos demanda minuto a minuto, segundo a segundo a vivir como Cristo sin llegar a ser fanáticos religiosos, sin aburrirnos en las cosas de Dios Maxime cuando sienten que han perdido el primer amor con el Señor.

Cuidado cuando comienzan a tolerar pecado y ya algunas cosas no son tan malas como pensabas antes. Cuando las jóvenes ya no tienen temor de mostrar su desnudes, cuando se pierde el temor a emborracharse, cuando ya no le importa criticar al hermano, cuando se unen en yugo desigual con incrédulos..., etc. Por lo anterior es que ahora hay muchos cristianos con un ojo menos... porque han perdido el temor a Dios.

El ojo derecho, era el ojo por el cual miraba el guerrero, por ello es que los amonitas querían que se lo sacaran los israelitas, si el diablo te arranca el ojo ya no serás un cristiano poderoso, mirarás con la vista que el mundo mira

Pero ¿por qué perderse? Más cuando dice la Biblia, que se levantó un varón de Dios, que se encendió de celo y Dios lo respaldó. Y el Espíritu de Dios estuvo sobre El, con poder.


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