No Sea Ignorante Bíblico – Por Saúl Guevara

 


"Por lo tanto, abandonando toda maldad y todo engaño, hipocresía, envidias y toda calumnia, deseen con ansias la leche espiritual pura, como niños recién nacidos. Así, por medio de ella, crecerán en su salvación, ahora que han probado lo bueno que es el Señor" 1 Pedro 2:1…3

 Muchas personas abandonan su propósito de leer la Biblia al poco tiempo de iniciarlo y es que son perezosos para leer, si un comentario o texto tiene más de una página es demasiado largo.

 La ignorancia bíblica consiste no solamente en no conocer la Biblia, sino en conocerla mal, textos mal citados, mal utilizados y mal interpretados son frecuentes en las discusiones entre cristianos, ideas como “atar y desatar”, “la letra mata pero el Espíritu vivifica” y “no juzguéis”, son pasajes generalmente mal utilizados, y cuando un seudo predicador se pone delante de una congregación con anécdotas graciosas y dos o tres pasajes fuera de contexto para prometer riquezas y salud en todo tiempo, a cambio de "pactar" económicamente con Dios, eso es suficiente para que las de personas en el auditorio griten “amén”, poco importa si sus palabras son ciertas. Por falta de conocimiento el pueblo de Dios es llevado cautivo, es destruido y sacudido por todo viento de doctrina (Oseas 4:6; Isaías 5:13; Efesios 4:14).

 La ignorancia Bíblica es el mayor desafío para predicar porque las personas están acostumbradas a una interpretación superficial, alegórica e incorrecta de las Escrituras y cualquier intento de aplicar los textos en su debido contexto a menudo se encuentra con mucha oposición. Nicodemo era maestro de Israel y creer en Jesús no sólo le representó rechazo de su pueblo y ser excluido, también significó perder privilegios, honores y reconocimiento, debía pasar de ser “el maestro” a ser un discípulo, él al igual que José de Arimatea y Pablo entendieron que todo lo que consideraban valioso, era solamente basura comparado con el conocimiento verdadero del Señor.

 La ignorancia Bíblica es también característica o distintivo de pastores que pretenden que solamente con buenas intenciones puede alimentarse y nutrirse a la congregación. Si nosotros fuimos mal enseñados y nos topamos cara a cara con la verdad, debemos establecer a quien le debemos fidelidad, solo una Biblia completa hace a un cristiano completo, no le debemos fidelidad a un pastor, denominación o líder eclesiástico sino a Dios y a Su Palabra, si usted está a cargo de una congregación no se conforme con repetir mensajes, vaya a la Biblia y aprenda a leerla y estudiarla en su debido contexto, adquiera comentarios Bíblicos y libros de interpretación y teología que le permitan alimentar correctamente a las personas a su cargo al mismo tiempo que usted aprende y se desarrolla. Haber sido mal enseñado no es excusa para enseñar mal.

La ignorancia Bíblica se ha convertido en epidemia. La gente, incluyendo muchos que profesan ser cristianos, simplemente no sabe lo que la Biblia enseña y a menudo sostiene creencias no bíblicas e incluso heréticas.

 ¿Qué podemos hacer como pastores, padres, o maestros de escuela dominical? ¿Cómo podemos combatir la ignorancia bíblica? Aquí hay algunas ideas:

 1.    No asuma que la gente conoce los fundamentos del Evangelio

 Muchas veces tendemos asumir que la gente joven que ha crecido en la iglesia comprende el Evangelio y otras doctrinas bíblicas, pero no debemos asumir esto. La investigación muestra que muchos que profesan ser cristianos ni siquiera entienden las bases del mensaje del Evangelio, no digamos otras doctrinas fundamentales o secundarias. Es necesario que se predique el Evangelio en todos los sermones y en todo momento de enseñanza.

 2.    Debemos enseñar el Evangelio completo

 No solamente enfocarnos en el aspecto inmediato del Evangelio, como la cruz y la resurrección, sino enseñar todo el evangelio desde el principio hasta el fin, incluyendo las malas noticias acerca de nuestra naturaleza pecaminosa que se inicia en Génesis con la caída, el justo juicio de Dios y la condenación en retribución a nuestro pecado.

 3.    No debemos enseñar que la Biblia es una historia real.

 Enseñar la Palabra de Dios como historias, puede sin intención, transmitir la idea que la Palabra de Dios no son nada más que cuentos de hadas y que no es autoritativa. Debemos enseñar y ver los hechos de las Escrituras como historia real y ayudar a la gente a entender como estas narraciones nos enseñan teología y doctrina. La Biblia nos enseña acerca de Dios y su plan perfecto a través de toda la historia.

 4.    Enseñe toda la Biblia.

 En nuestro tiempo a menudo nos encontramos que el Nuevo Testamento es mucho más fácil de entender que el Antiguo Testamento, porque el Antiguo está lleno de conceptos e ideas que nos son extrañas como el sacrificio Levítico y la ley, pero estas son bases fundacionales para el Nuevo Testamento que nos enseña acerca de Cristo y lo que él hizo por nosotros. El Viejo Testamento es parte de nuestra Biblia por una muy buena razón y necesitamos enseñarla.

 5.    Si usted enseña anime a que le hagan preguntas y respóndalas

 Sea consciente que usted necesita aprender elabore preguntas y busque respuestas de alguien con mayor madurez y conocimiento real de las Escrituras. Nadie aprende solo, todos aprendemos juntos.

 El cristianismo es una fe basada en la razón y tiene respuestas para las preguntas escépticas de nuestros días, anime a la gente que lo escucha, especialmente a los jóvenes a hacer preguntas y si usted no tiene las respuestas, sea honesto y dígales eso, pero también prométales que le dará seguimiento y que las encontrará y cúmplalo, ambos usted y ellos aprenderán algo en el proceso. Si es usted quien está en proceso de aprender elaboré preguntas mientras lee y busque respuestas.

 Dios nos manda por medio del apóstol Pedro a dar razón de nuestra fe a todo aquel que nos lo pida (1 Pedro 3:15) y por medio de Pablo, nos manda presentarle un culto racional y no emocional, y a no adaptarnos al sistema del mundo sino a renovar nuestro entendimiento para conocer cuál es SU Voluntad buena, agradable y perfecta (Romanos 12:1…2)

 La Biblia no es un amuleto de buena suerte que nos bendice sólo por leer unos párrafos, aunque no entendamos nada, debemos buscar conocer y comprender las Escrituras para ser guiados verdaderamente por el autor de las Escrituras, el Espíritu Santo. Pida en oración a Dios que Su Espíritu lo ilumine para entender, valore el conocimiento de La Palabra de Dios como para invertir tiempo y dinero en adquirir materiales de estudio, puede también buscar en una biblioteca o recursos gratuitos en línea, siempre teniendo cuidado y pidiendo consejo acerca de cuáles materiales son confiables y contienen sana doctrina y pida a Dios en oración que le conceda la gracia para poder obedecer lo que lee y que ahora comienza a entender.

 Que Dios bendiga su estudio y le de hambre y sed de Su Palabra.

S.A.G. – 11 – FEB – 2024

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario