El Cristiano Y La Brujería.


Los males que sufre la humanidad son fruto de su apertura al demonio por el pecado. Una forma extrema de esa relación es la brujería. La miseria del alma humana hace que los hombres y mujeres lleguen a pactar con el demonio y a buscar su intervención.  La enseñanza de la Biblia nos hace ver en que la brujería es real y digna de condenación.  Jesucristo vino para vencer y atar al demonio. Con frecuencia se enfrentó directamente con él para reprimir su actividad sobre sus víctimas. El tiempo entre la primera y segunda venida del Señor es de gran batalla espiritual y nos involucra a todos. Por otra parte, por muchos siglos y en muchas naciones, la ignorancia, la crueldad y falta de justos procesos judiciales, fundamentalmente de la iglesia católica,  llevaron a terribles persecuciones, falsas acusaciones y la matanza de muchos acusados de brujería. Hechos injustificados y deplorables. En la actualidad hemos caído en el extremo opuesto: se niega la realidad de la actividad satánica y por ende, de la brujería. 

Como cristianos debemos seguir el camino de Jesucristo quién rechaza el pecado pero ama al pecador. La enseñanza de Jesús en el caso de la mujer sorprendida en adulterio se aplica también a la brujería como a cualquier pecado. El camino de Jesús no es la condenación al estilo de los que se proponían apedrearla. Tampoco es la actitud de los que hoy pretenden que no existe el pecado. Eso sería abandonarla sumida en su desgracia. El mal no se vence matando sino ayudando con amor y verdad a salir del pecado.  El Señor nos enseña a amar a nuestros enemigos.  No debemos de olvidar que el amor  de Dios es más fuerte que la maldición de todos los brujos del mundo. Una gota de la sangre de Jesús, con la cual hemos sido lavados de todo pecado, tiene el suficiente poder para disipar el más enfurecido ataque diabólico.

La Biblia, condena enérgicamente esta actividad: Deuteronomio 18:10..14: "10 No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero,  11 ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. 12 Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti.  13 Perfecto serás delante de Jehová tu Dios. 14 Porque estas naciones que vas a heredar, a agoreros y a adivinos oyen; mas a ti no te ha permitido esto Jehová tu Dios."

Los cristianos debemos evitar andar con medallas de santos y santas, el horóscopo, amuletos, collares de santería, etc. Andar en esas cosas y con esas cosas es pecado, porque si sabiendo hacer el bien no lo hacemos, nos es tomado como pecado. La Iglesia es dura en esto, pero la Biblia es más dura todavía: En el Deuteronomio dice que todo esto es "abominación" ante Dios, que Dios "abomina" a quien hace alguna de estas cosas, que a Dios le da "asco", "detesta", "aborrece" a los que hacen algo de esto, de espiritismo, de santería, de hechicería, de astrología, etc. En Levítico dice que los que hagan algo de esto "serán matados a pedradas"... y en Isaías dice que los astrólogos, los que siguen el horóscopo sean quemados en las llamas... Así es que la Biblia es más dura todavía, porque todo esto es pecado grandísimo.

La ouija, las cartas de la suerte, la lectura de la palma de la mano, las aguas que dan las brujas... todo es hechicería y adivinación y pecado contra Dios. Todo esto es pecado, porque es buscar nuestro bienestar en la protección de Satanás, es alabar al diablo y proclamar públicamente su bendición... Es prostituirse contra Dios (Levítico 20:6). Es pecado porque tenemos que buscar el bienestar personal y social solamente en la providencia amorosa de Dios.  Las estampitas, las ya mencionadas medallitas, las esculturas y todas esas cositas que con mala intención se nos han sido enseñadas, tienen que salir de nosotros, Dios es un Dios celoso que se marcha y maldice a los que no confían sólo en él. Así lo dice la Biblia: "8 No harás para ti escultura, ni imagen alguna de cosa que está arriba en los cielos, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. 9 No te inclinarás a ellas ni las servirás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen,  10 y que hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos" (Deuteronomio 5:8..10).

Haz tú lo que hicieron los de Éfeso: Confesaron sus prácticas supersticiosas... quemaban los libros de magia en público, llegándose a calcular el precio de los quemados en 50.000 monedas de plata (Hechos 19:18..20). Haz tú lo mismo: Tira tus medallas, ese  horóscopo, tus santitos, tus collares de santería... quítaselos también a tus hijos, a tu esposo o esposa... confiesa tu pecado a Dios... y tendrás la bendición que sólo viene de nuestro amado Padre Celestial... y te librarás tú y los de tu casa de la maldición de Satanás. Fía tu bienestar sólo en Dios que está ahí ahora a tu lado, que te ama, que quiere llenarte de su amor y gozo... arrepiéntete de tu pecado, porque el pecado es basura, porquería, donde sólo Satanás puede revolcarse... Los trabajitos y asquerosidades que hacen las brujas, hechiceros y santeros son también porquerías del diablo... apártate de ellos como si fueran serpientes venenosas. Si Jesús está en tu corazón, no tengas miedo a ninguna superstición, ni al gato negro, ni al número 13, ni a las sombras de la cama, ni a la escalera... ¡a nada!, porque todo eso no es más que puras mentiras inventadas por Satanás y Jesús es más poderosos que Satanás... Sólo con le nombre de Jesús salen los demonios corriendo humillados, como perros con el rabo entre piernas.

Algunos me han escrito diciendo que la "bruja" o el "astrólogo" en la televisión mencionaba los nombres de Cristo o de Dios. Mi hermano, la adivinadora de los Hechos también iba nombrando a Dios, diciendo estos hombres son siervos del Dios Altísimo... Pablo se volvió y dijo al espíritu de adivinación: En nombre de Jesucristo te mando salir de ésta, y en el mismo instante salió (Hechos 16:17..18). Los de Satanás tratan de nombrar a Dios para engañar... no te dejes engañar, si es un hechicero o un astrólogo, no es de Dios, es del diablo... No oiga en la televisión los programas de astrología; son de Satanás, es un pecado.

En todo esto hay, por desgracia, mucha ignorancia. En las calles, en casas y aun en lugares cristianos, veo muchas personas que llevan una medalla o amuletos, porque nadie les ha dicho que no se puede alabar a Dios y al diablo a la vez, nadie les ha dicho que el bienestar sólo lo tenemos que esperar de la providencia amorosa de Jesús... otros cristianos salen de la iglesia y van al hechicero, porque nadie les ha dicho que las brujas y hechiceros son del diablo... otras personas ven con gusto programas en la televisión o radio sobre astrología o el horóscopo, sin saber que son obras del diablo... todo lo de astrología, hechiceros,, espiritismo, etc. es un pecado en contra de Dios y es la mejor forma en que Satanás se "posesiona" de una persona y no puede recibir las bendiciones que luego busca de Jesús.  

SÍMBOLOS QUE LOS CRISTIANOS DEBEN EVITAR: 

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